El vestuario de trabajo no tiene porqué ser difícil de adaptar a una barriga en crecimiento. Afortunadamente, la mayoría de la ropa premamá puede servir para ir correctamente a trabajar. Te presentamos cómo mostrar tu estilo en la oficina los próximos nueve meses:
Durante los tres primeros meses de embarazo probablemente puedas salir con tu ropa de trabajo normal, optando por partes superiores y pantalones holgados. Cuando vayas engordando, las cremalleras y los botones extensibles te permitirán adaptar tu ropa durante algunas semanas más.
Atrás han quedado los días en que las mujeres llevaban grandes tiendas de campaña para distraer la atención de su abultada barriga. Invierte en un vestido elegante de una talla mayor y lucirás con estilo los siguientes nueve meses.
Ponte una chaqueta estructurada sobre un vestido de punto fino para dar una apariencia más estilizada. Una blusa elegante sobre un pantalón negro premamá ajustado es ideal para sentirte cómoda y distinguida.
Podrás comprobar que durante el embarazo aumentas la talla de calzado, por lo menos, la mitad de un número, pero podrás solucionarlo con zapatos con cordones o con una botitas (ambos muy a la moda en este momento), en especial para largas caminatas. Las que estáis acostumbradas a los tacones veréis que se pierde el equilibrio según crece la barriguita, por lo que un zapato con un tacón ancho y de altura media es más aconsejable.
No hay necesidad de gastar una fortuna en ropa premamá. Después de todo, solo la vas a usar durante unos meses. En la mayoría de los comercios tienen ropa de premamá a precios muy razonables.
Siempre puedes actualizar tu nuevo look con un bolso de cuero o con alguna nueva joya. ¡Date un caprichito!